jueves, 21 de julio de 2011

CON VIDA PROPIA

No sé que ha ocurrido con el libro. Yo lo puse con la literatura contemporánea. Quizás debí haberlo metido entre autores americanos del s. XX. Estoy segura, pensé: lo dejo aquí, es un best seller, quizás no me guste. Cuando lo lea, lo clasificaré mejor. Y ya no está. Juro que iba a empezar a leerlo hoy, aunque debo reconocer que sin mucho entusiasmo. Seguro que el maldito libro se ha enterado y a saber donde ha emigrado. No sé, no está entre los clásicos, ni entre los comics, ni entre la literatura iberoamericana. Tampoco entre la poesía. En ciencia ficción, no he buscado. Los científicos lo delatarían por su formato, y los de colección  por su portada ¿Dónde estará? ¡Traidor, me va a dejar con la intriga de encontrarlo y con el deseo de leerlo! Y lo peor es que, como en una noche loca, no recuerdo su nombre, aunque si su tamaño y sus formas.  Si ya lo dicen los anuncios de incitación a la lectura: “Los libros tienen vida propia…”

5 comentarios:

  1. Hola, quizás no lo hayas leído, me gustaría contar con tu Olvidar tu Mirada para mi Microinvitados de la semana que viene. Espero tus noticias.

    Blogsaludos

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  2. Puedes contar con ello. Gracias.

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  3. eso le decía yo a mi padre cuando me decía que por qué no había estudiado; el libro de mates, papa, que no lo encuentro...

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  4. Muerte roja

    De haberlo sabido antes tendrías que haberlo metido en el apartado de libros furtivos.

    Un saludo :)

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  5. No me negarás que su realidad esquiva no lo hace aún más interesante. Realmente has logrado dotar de vida a ese preciado objeto de papel. Un abrazo.

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